MADRID 11 Ago. (EUROPA PRESS) -
El mar de China Meridional ha vuelto a ser escenario este lunes de escenas de tensión entre barcos chinos y filipinos, durante las cuales dos buques vinculados a la Marina y a la Guardia Costera de China llegaron a impactar en el marco de una persecución a un patrullero de Filipinas.
El suceso ha tenido lugar en la zona conocida como bajo de Masinloc o atolón de Scarborough, un área en disputa donde la Guardia Costera de Filipinas desplegó dos de sus barcos en apoyo a la navegación por este área de más de una treintena de embarcaciones pesqueras.
Un portavoz de la Guardia Costera filipina, Jay Tarriela, ha explicado en la red social X que estas embarcaciones tuvieron que hacer frenta a "maniobras peligrosas y acciones de bloqueo" por parte de buques chinos, a los que han acusado de utilizar un cañón de agua.
La tensión habría llegado a tal punto que un barco de los guardacostas de China impactó con otro de la Marina del mismo país cuando perseguía "a gran velocidad" a un buque filipino. Según Tarriela, el choque provocó "daños sustanciales" en uno de los barcos, hasta el punto de que no podría ya seguir navegando.
Las autoridades filipinas brindaron entonces asistencia a la parte china, también para los tripulantes que, según esta versión, resultaron heridos como consecuencia del impacto.
Este último incidente llega apenas unos días después de que Pekín recriminase al presidente de Filipinas, Ferdinand Marcos Jr., unas declaraciones sobre un potencial conflicto entre Estados Unidos y China a cuenta de la isla de Taiwán.